En los últimos años ha resurgido el interés por la herbolaria, también conocida como fitoterapia, esto se debe a que la gente está retomando lo natural para conservar y recuperar la salud a través del uso de plantas y hierbas medicinales. Se calcula que existen en el mundo 25 mil plantas medicinales y aproximadamente 5 mil se encuentran en México distribuidas en diferentes regiones.
Desafortunadamente están en peligro de desaparecer más de 4 mil plantas medicinales mexicanas porque sólo se mantiene el cultivo de 100 especies y se corre el riesgo de perder el germoplasma de miles de estas plantas por su escasa producción, hay una lista de 432 hierbas prohibidas sin que se hayan presentado estudios que justifiquen su prohibición.
Por eso, es vital conocer las propiedades de éstas plantas como una alternativa importante para conservar o saber cómo recuperar la salud. Para ello, la Universidad Autónoma de Chapingo está implementando una estrategia para impulsar, conservar y producir plantas medicinales en el país a través de las Farmacias Vivientes.
El formato de estas farmacias, de las cuales ya se han instalado 500 en zonas rurales y urbanas, es a través de huertos para la atención inmediata de padecimientos leves como dolor de cabeza, de estómago, diarreas, etc.
Asimismo se realizó la Segunda Feria Nacional de las Farmacias Vivientes, Naturismo y Plantas Medicinales, la cual se llevó a cabo en las inmediaciones de la Universidad Autónoma de Chapingo el pasado 27 de abril, con la finalidad de difundir el uso de la medicina tradicional mexicana, sistema integral de curación basado en procesos culturales, compuesta por cuatro elementos, uso de plantas medicinales, minerales, animales medicinales y prácticas específicas como los temazcales, curas de empacho y sobadas.
El fin es informar sobre la gran riqueza cultural de estas plantas medicinales, consideradas una alternativa real de salud. Ante esto, la Federación Nacional de la Industria de Herbolaria y Medicina Alternativa, Tradicional y Naturista (FNIHMATN) apoya la decisión de solicitar a la UNESCO que reconozca a la herbolaria mexicana como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Y es que la herbolaria mexicana está reconocida como un derecho cultural y de salud de los mexicanos en la Carta Magna y en la Constitución de la Ciudad de México, con el objetivo de que se fomente su desarrollo. Sin embargo, de nada sirve mientras los artículos 215 y 216 de la actual Ley General de Salud entorpezcan la producción y comercialización de tratamientos herbolarios al exigirles etiquetado y condiciones de producción.
Además, las plantas medicinales también pueden representar la base de la economía en muchas comunidades por el marcado interés de regresar a lo natural, por lo que existe una importante demanda de la industria de productos herbales farmacéuticos, por ello es importante proteger y cuidar los recursos naturales para reproducir el conocimiento tradicional herbolario.
Fuente: SAGARPA, FNIHMATN, SIPSE